Why so serious?

    "Compra cómics de verdad, y déjate de Masacres.." esa fue la frase que me espetaron hace tiempo en una famosa cadena de tiendas de cómics (se dice el tebeo pero no el entintador). De vueltas a la eterna discusión de los cómics son cosas de niños, las novelas gráficas para adultos... de nuevo la popular moda de decirte lo que debes leer y lo que no porque yo lo valgo..  pero en este caso este pequeño artículo no va a ir por ahí. Trata sobre el humor, ese género tan infravalorado y que a su vez es tan complejo y difícil como el que mas. 


   En La Tierra Salvaje amamos a Masacre, adoramos al Motorista Fantasma Cósmico o idolatramos a Rob Liefield. ¿Por qué? Pues porque nos hacen reír (aunque no fuese la primera intención de alguno de ellos), porque a veces te apetece leer un tebeo para divertirte, pasar un buen rato y echarte unas risas. No siempre te sumerges en las viñetas buscando aprender el significado de la vida o el porque de complejidad del ser. No, a veces sólo buscas la sonrisa fácil, la carcajada exagerada, y eso amigos es tan complicado de lograr como hacerte llorar o tocarte la patata.

   Saber reírse de casi todo y de uno mismo sería lo ideal, es algo que desgraciadamente no abunda, podríamos considerarlo una virtud. La risa es sinónimo de felicidad, de diversión, ¿por qué entonces un tebeo humorístico tiene que ser considerado menor? ¿Es más infantil leer algo que te haga reír? ¿Los adultos sólo podemos aspirar a historias para soltar la lagrimita o a las que te estrujen el cerebro para saber lo que te están contando? Pues mire usted no. Casi todos entramos en el mundo de la lectura y del cómic por el género humorístico. Mortadelo, Superlópez o incluso Spiderman con sus clásicos chascarrillos durante las batallas son los que te dan la bienvenida y los que te hacen quedarte de por vida. ¿Se debe abandonar estas lecturas al alcanzar la madurez? ¿Hay alguna razón contundente para ello?

   No todo lo que leas tiene que ser Watchmen o Born Again. Hay veces, que sencillamente me apetece coger un volumen del Dr Slump y sentarme un rato a reírme de las tonterias que se le ocurren a Toriyama, y me rio incluso más que cuando lo leí de niño. Quizás si todo el mundo riese un poco al día, este sería un mundo mejor, bueno quizás no, seguro. Ya lo resumió el gran Charles Chaplin en una famosa frase que te ayudará más que cualquier libro de autoayuda: "Un día sin reír es un día perdido"


 Sithvillista




Comentarios

  1. Qué risas, sobre todo, aquellas cuatro carillas de Pafman (de Cera) que solían incluir en los SuperMortadelos de los noventa

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